La acción constante de los agentes atmosféricos es un verdadero problema para todo tipo de edificios, tanto para viviendas como para infraestructuras públicas.
La lluvia, el viento, la nieve, pero también los cambios bruscos de temperatura y las variaciones en la humedad deterioran porcentualmente los edificios de nuestras ciudades.
Algunos de estos daños son inmediatamente visibles, mientras que otros, debido a reacciones químicas particulares, pueden pasar desapercibidos hasta que es demasiado tarde.
Para reducir el riesgo de derrumbe y ahorrar en costes de rehabilitación, es bueno realizar pruebas precisas en los materiales de construcción para garantizar su resistencia y durabilidad frente a estos procesos.
Un proceso esencial a mantener bajo control es la carbonatación.
¿Qué es la carbonatación?
Carbonatación es el proceso químico por el que una sustancia, en presencia de dióxido de carbono CO2, da lugar a la formación de carbonatos.
En algunos materiales de construcción, como la cal o el hormigón simple, la carbonatación tiene efectos neutros, si no positivos.
La historia es diferente para el hormigón armado: la carbonización es la primera causa de deterioro de dicho material, desencadenando la corrosión de las barras de refuerzo.
El dióxido de carbono presente en la atmósfera, actuando desde las capas más externas hacia las más internas, afecta a la estructura de acero, poniendo en peligro la solidez de todo el edificio.
El hormigón armado es uno de los materiales de construcción más comunes en nuestras ciudades y prevenir el fenómeno de la carbonatación con ensayos específicos se ha hecho necesario para garantizar la seguridad de los edificios.
¿Qué factores provocan la carbonización de los materiales de construcción?
Para entender en qué medida nuestra estructura se verá afectada por la carbonatación, hay que tener en cuenta dos variables: las condiciones ambientales y las características de nuestro hormigón.
Las condiciones ambientales que afectan a la carbonatación del hormigón son:
- La humedad
- La temperatura
- La concentración de CO2 en el aire
Las características del hormigón a tener en cuenta son:
- La relación agua/cemento
- El tipo de hormigón
- Porosidad
- Condimentación
- La aplicación
A partir de la interacción de estas variables, podemos predecir si se producirá un proceso de carbonatación y cuándo. Pero, ¿cómo hacerlo?
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